CHAPAPOTE

 

El 24 de marzo de 1989 el petrolero «Exxon Valdez«, con una carga de 1,48 millones de barriles de crudo, derramó en la bahía de Prince William Sound, Alaska, 37.000 toneladas de hidrocarburo. Este fue el mayor desastre ecológico hasta el momento y fue una fecha clave, un antes y un después, para concienciarnos de la capacidad destructora del hombre moderno.

Hace algunos años en Galicia, sufrieron la desgracia de otro vertido, esta vez el buque fue el «Prestige«, y se acuñó el lema, «Nunca Mais», que significa nunca más, y eso es lo que esperamos todos que sea. Pero desgraciadamente no es así, y por lo visto el hombre no aprende de sus errores. Pero esta desgracia concienció a los países europeos para exigir que los buques petroleros tuvieran doble capa en su casco.

Este verano en la costa cercana a Ibiza, se produjo el hundimiento del buque «Don Pedro» que mantuvo durante un par de meses la tensión en los bañistas de las maravillosas playas de esta isla del Mediterráneo español, afortunadamente las corrientes no permitieron que este vertido llegase a Formentera, pero en plena campaña turística de verano, los que viven de este sector sufrieron sus consecuencias, pero también la fauna y la flora marina.

El hombre, como siempre, intenta destruir lo más bello de la naturaleza, destruir el entorno y los recursos naturales, destruir nuestro futuro. En estos últimos días se está produciendo un vertido contaminante de combustible en el estrecho de Gibraltar. El barco chatarrero «New Flame» que encalló en el mes de agosto en esas aguas se está hundiendo y está vertiendo combustible por toda la bahía de Algeciras, a esta desgracia se suma la del buque  «Sierra Nava«, por lo que en la zona, una de las de mayor tránsito de buques del mundo, está soportando una desgracia tras otra.

 

Se está pidiendo explicaciones al gobierno británico por la negligencia de las autoridades gibraltareñas, pero algunos han cambiado el nombre del Chapapote por el de Zapapote, porque achacan que desde el més de agosto el gobierno español no ha hecho nada por solucionarlo, nada más que cuando ya es tarde. El hombre, siempre actua tarde cuando ya no hay solución y el fracaso de su gestión es más que evidente, recordemos todos los vertidos que se han producido en los últimos 20 años y nos daremos cuenta de nuestro propio fracaso como gestores del único bien que poseemos, nuestro planeta.